TITO MAGO

Hoy compartimos "Tito mago", escrito e ilustrado por Guido van Genechten, traducido por P. Rozarena y editado por Edelvives.

El cuento narra la historia de Tito, un payaso que admira a Taro, un mago que actúa en el circo y que lo tiene maravillado con sus trucos de magia y conjuros. Taro echa polvos mágicos en su sombrero y pronuncia las palabras mágicas: "¡Hocus Pocus Platus Plas...!" y salen de su sombrero pájaros, gallinas...

Tito quiere aprender a hacer lo mismo, recoge polvo mágico de Taro, lo echa en su sombrero y lo toca con su varita pronunciando las palabras mágicas "¡Hocus Focus Platus Pas...!" pero en su sombrero no pasa nada. Aunque echara muchos polvos y tocara mucho con su varita, su sombrero seguía vacío.

A la mañana siguiente Tito le pidió a Taro que le enseñara algunos trucos de magia y Taro accedió, cogió su sombrero y su varita y despacio, muy despacio le hizo el truco. Primero echo los polvos, tocó tres veces con su varita y pronunció las palabras mágicas: "¡Hocus Pcus Platus Pas!" y de su sombrero salió un precioso conejo blanco. Tito se quedó impresionado y se preguntaba cómo lo haría.

Taro le preguntó a Tito si lo había observado bien y si podía recordarlo todo. Tito creía que si y Taro le dijo que sólo podría hacerlo, si él creía que podía hacerlo (para mí es lo mejor del cuento).

Esa tarde Tito se fue al circo a observar como Taro hacia magia con su sombrero y cuando acabó, Taro le pidió a los asistentes que recibieran con un gran aplauso a su ayudante....¡Tito! quien salió con una gran sonrisa a los sones de la orquesta. Taro le dio su capa, su varita y su sombrero a Tito y le dijo que ahora la magia la hacía él. Tito, muy valiente se dirigió al centro de la pista. Pero cuando tuvo que empezar, Tito temblaba muchísimo, espació el polvo mágico, sobre el sombrero, tocó con la varita y pronunció las palabras mágicas mientras Taro le decía: "yo sé que puedes hacerlo".

El conjuro de Tito funcionó, de su sombrero apareció un ratoncito blanco y todos los asistentes y Taro se quedaron maravillados y le aplaudieron a Tito el Mago. Tito saludó muy orgulloso y feliz porque por fin había hecho magia

El cuento tiene una historia magnifica querer hacer algo, pedir ayuda, que alguien confíe en ti y te ayude a que tú confíes en ti para finalmente conseguirlo, es un mensaje precioso en esta sociedad en la que todos nos creemos autosuficientes. Pedir ayuda, ayudar y ser ayudado es uno de los valores que debemos sembrar en los niños y niñas de nuestro presente para que en el futuro todo sea una cadena de favores de una forma natural, como dijo Madre Teresa de Calcuta: "yo hago lo que usted no puede, usted hace lo que yo no puedo. Juntos podemos hacer grandes cosas".

En relación a las ilustraciones son muy sencillas, con unos fondos neutros en los que destacan unos personajes muy vistosos y expresivos emocionalmente.

En casa a Matías este cuento le gusta mucho porque sale el payaso y hace magia, ¡Hocus Focus Plas! son las palabras que él utiliza cuando quiere hacer algo que nos asombre o su magia particular, está en una etapa muy creativa jajajaja.

Este cuento lleva conmigo varios años, lo compré para iniciar un proyecto del circo que nos dio mucho juego y del cual los niños y niñas disfrutaron mucho. Después, lo he contado para disfrutarlo y para destacar como nos podemos ayudar los unos a los otros y juntos poder hacer grandes cosas, desde ponernos las mochilas hasta hacer una lista de la compra e ir al supermercado.